“Nunca se ha logrado nada sin entusiasmo” (Emerson). ¿Te acuerdas de tu niñez en la escuela, en cómo te comportabas y cuál era tu actitud de pequeñ@ en la escuela?
Quizá nosotr@s fuimos buenos estudiantes y esperamos que nuestr@s niñ@s también lo sean; también es posible que nosotr@s no lo hayamos hecho tan bien como hubiésemos debido, y por eso nos preocupa mucho más que ellos puedan cometer nuestros errores. En cualquier caso, lo primero que debemos recordar es que, sin lugar a dudas, nuestr@s hij@s son diferentes a nosotr@s.
Lo más importante que debemos saber es que la MOTIVACIÓN es fundamental para que cada un@ podamos llevar a buen término nuestras actividades. Si además, a este concepto le añadimos INICIATIVA, tenemos todos los ingredientes que necesitamos para poder llevar a cabo cualquier tarea con éxito.
Y esto, para l@s niñ@s, es todavía mucho más importante.
Tenemos que aprender a motivarles, y dotarles de conocimientos que a ell@s les ayude a automotivarse, ya que cada un@ debe encontrar su propia motivación.
Un ejemplo que nos puede ayudar a comprender el concepto de motivación es el siguiente: supongamos un vaso de agua:
- Acabamos de beber, y dos minutos después nos ofrecen un vaso de agua si damos un salto, ¿nos motiva algo ese vaso de agua? Está claro que no, pues nuestra necesidad ya fue satisfecha dos minutos antes, así que ni nos molestaremos en dar un salto para conseguir ese vaso de agua.
- Otra persona lleva dos horas caminando a pleno sol, está sedienta. Llega a un lugar en el que le ofrecen un vaso de agua a cambio de que de tres saltos, ¿saltará esa persona para conseguir ese vaso de agua? Definitivamente si (si está en sano juicio), pues tiene sed, y el esfuerzo de saltar compensará con creces la recompensa que le espera: beber ese ansiado vaso de agua
Como vemos, la motivación es diferente en cada persona y en cada situación, pues está constituida por todos los factores que son capaces de provocar, mantener y dirigir la propia conducta hacia un objetivo claro. Es por ello que os invito a reflexionar como padres sobre el sistema educativo en el que estudiasteis vosotros y en el que actualmente estudían vuestros hijos. Es hora de empezar a comprender a nuestros hijos. ¿Cómo queremos que presten atención en el aula cuando…, cómo queremos que aprendan si…, cómo queremos que aprueben …?. Aquí os dejo un vídeo muy representativo de que es lo que está ocurriendo en la gran mayoría de escuelas , salvo algunas alternativas.
Cada un@de vosotr@s, madres y padres, sabéis mejor que nadie cómo es vuetr@ hij@. ¿Porqué se pretende que en la escuela los niños avancen a la vez?, si ningún niño es igual a otro. Cada uno tiene unas necesidades, cada uno precisa un tiempo para una misma actividad, cada niño requiere una atención distinta… Es momento de reflexión y de cambio!!!!
Pequeteca – Felicidad e Inteligencia Emocional
¡¡¡Aquí queda eso!!!
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